"Los psicópatas en las relaciones íntimas suelen exhibir manipulación emocional, un encanto superficial y una total falta de empatía. Esto genera un desequilibrio en la relación, donde la víctima se vuelve dependiente del psicópata, tanto emocional como, en ocasiones, financieramente. A menudo, la víctima llega a sentirse incluso responsable del abuso que está experimentando."
(Lilienfeld, S. O., & Arkowitz, H. (2008). Psychopathy and intimate relationships: Understanding emotional abuse.
Las relaciones de pareja son una fuente de bienestar, y en situaciones normales somos nosotros los encargados de cuidar esa fuerza amorosa que nos une a otro y viceversa. Esta fuerza poderosa nos da vitalidad y felicidad, siendo una fuente de energía positiva en nuestra vida y un protector del estrés y la ansiedad. Sin embargo, hay situaciones en las que puede ser lo contrario, llegando a convertirse en una desgracia, eso sucede cuando uno de los miembros de la pareja distorsiona ese amor y lo usa como una forma de control, para lograr dominar y alimentar sus propios deseos. La relación se convierte en una instancia en la que nos manipulan, nos devalúan, critican y nos dañan.
En este artículo hablaremos de los "vampiros del amor", aquellos individuos que se cruzan por la vida de muchas personas, o incluso de nosotros mismos, y se infiltran en la vida de sus parejas, creando una ilusión de amor. Si conoces a alguien o has vivido esta experiencia, comprenderás de lo que hablo: de ese psicópata emocional que se alimenta de la energía de su pareja y saca provecho, llevando a su pareja a la destrucción.
Conocer este perfil nos ayudará a hacernos conscientes, identificar situaciones y apoyar a esa amiga o amigo (si es hombre) que esté viviendo esta dinámica de maltrato en su relación de pareja. Y si te está sucediendo a ti, te hará consciente de lo que está pasando y te ayudará a buscar ayuda.
Para quienes lo han vivido o lo viven, saben que estos individuos que superan los personajes de ficción, te envuelven en e una relación abusiva y tóxica que te roba la autoestima, te desarma y te anula como persona. Estos individuos seductores se infiltran en la vida de alguien con la clara intención de aprovecharse emocionalmente, económicamente o físicamente. Si bien la manipulación puede ser difícil de detectar en sus primeras etapas, el daño que causan es profundo, traumático y doloroso. Solo la ayuda comprensiva de quienes te quieren y un proceso terapéutico profundo ayuda a salir de ese estado , superar las secuelas y sobreponerse al estrés postraumático que dejan, recuperando el control de nuestra vida.
Aprender a reconocer a estos sujetos nos ayudará a protegernos de estos "príncipes vampíricos" que chupan hasta dejar a su pareja vacía; y que no son, para nada, criaturas mitológicas, por el contrario, suelen compartir el día a día con nosotros, porque son expertos en ocultar su comportamiento manipulador, controlador y destructivo; a encantar a mujeres y también a hombres con su carisma y seducción.
Creyendo que se encontró al "hombre o mujer de tu vida" , a la "media naranja", ignoramos que detrás de esa fachada podría haber un ejercicio de seducción de un sujeto que nos pone en un lugar de presa, y como cualquier depredador, está al acecho.
Pero, ¿cómo nos envuelven, logrando anular nuestra voluntad y haciéndonos ceder y tolerar esa dramática situación? Lo hacen porque desarrollan una habilidad tremenda para encantar, con promesas de un amor ideal, detectando las necesidades emocionales, los puntos vulnerables, y con un trabajo prolijo logran ser importantes y significativos en la vida de quien consideran su víctima.
El Gaslighting (Manipulación Psicológica) y la Empatía Cognitiva del Abusador
Efectivamente, actúan por fases.
En la fase de seducción, suelen mostrarse como el hombre o la mujer perfecta para ti, sensible y con promesas de sueño hecho realidad, van ganado terreno; siempre escondiendo en etapa, mostrando una fachada. Como todo psicópata al acecho, analiza inseguridades y fortalezas que le ayudarán a manipular.
Usan la empatía cognitiva; que no es una empatía real y es propia de estos seres, que intentan entender el funcionamiento emocional, pero no son capaces de sentir. Así con esas promesas vacías construyen una ilusión de amor incondicional haciendo a la víctima que comience a depender emocionalmente de esa relación.
Es que todos somos sujetos en busca de afecto (y eso ellos lo saben bien), necesitamos sentirnos amados excepto ellos, que no aspiran a un amor recíproco y genuino, mas bien a poder y control. Es justo en el momento, cuando ya se ha establecido una relación, se hace visible lo que esconden, evidenciando su compulsión utilitaria y sus deseos egoístas. En ese momento, el daño es más grande y se sabe que requerirá un gran esfuerzo y la necesaria ayuda terapéutica para reparar y rescatarse a sí mismo.
Una vez que el vampiro emocional ha generado confianza, vendrá un despliegue de formas de control. Si su pareja se resiste, el maltrato puede ser emocional y llegar a veces a lo físico. La persona psicópata suele usar el gaslighting (manipulación psicológica) para hacer que su pareja dude de su propia percepción de la realidad, generando disonancias cognitivas. La devalúa, desvaloriza e incluso humilla. Las personas suelen sentirse confundidas, inseguras y dependientes, y muchas veces culpables.
Las personas se ven presionadas al aislamiento social, pierden el sentido de sí mismas, y el psicópata vampiro se alimenta de su sufrimiento y debilidad. Se sienten superiores y pisan cuando pueden. Aunque no suelen tener remordimientos por sus acciones, sus manipulaciones están diseñadas para mantener a la víctima en un estado de confusión y dependencia emocional.
Son vampiros porque no solo maltratan emocionalmente, sino que se alimentan de la energía emocional de su pareja, de sentir el poder ante el otro. A medida que la relación avanza, el psicópata incrementa sus actitudes de control y se llega a una explotación emocional del otro. Suelen sacar provecho de todo, muchas veces el abuso se extiende a otras áreas, como el abuso económico, la utilización constante y el respeto cada vez menor por las decisiones, la vida y la privacidad de su pareja. Exigen cada vez más.
¿Qué nos pasa? Nos sentimos atrapados en un ciclo de "idealización y desvalorización". Seguro que viviremos momentos de "reconciliación"; este sujeto se mostrará comprensivo, hará promesas de cambio y amor, solo para volver a retomar las conductas manipuladoras y maltratantes. Este ciclo perpetúa aún más la dependencia emocional, haciendo que la víctima crea que la relación tiene altibajos naturales y que, si tan solo se esfuerza más, las cosas mejorarán. Recuerda, los vampiros necesitan sangre, por eso el psicópata nunca tiene la intención de cambiar, ya que su única motivación es obtener lo que desea sin importar el daño causado. Por eso tú tienes que cambiar, comenzando por rescatar tu autoestima, tu amor propio y convertirte en un sobreviviente que nunca más permitirá que eso te pase.
¿Cómo Sobrevivir a un Vampiro Emocional o Psicópata del Amor?
Es difícil, pero se puede. Busca ayuda terapéutica, te ayudará a aclarar estas disonancias cognitivas, a reconocer y asumir el maltrato emocional y la manipulación. En ocasiones, la familia no comprende cuando han sido objeto de su seducción, más aún cuando no hay evidencias, ya que muchas veces protegemos la imagen de estos depredadores y hemos cuidado su reputación pensando que era un hecho puntual lo que estaba pasando hace rato. Poco a poco, tu familia irá entendiendo. Las personas afectadas por este tipo de relaciones, con un proceso terapéutico de recuperación, recuperan su autonomía emocional, restablecerán sus límites y reconstruirán su autoestima. Busca un psicólogo o psicóloga que te acompañe, te comprenda, te entregue herramientas y te acompañe en algo tan fundamental como amarse a uno mismo.
Excelente , un taller que abrirá los ojos a muchos y verán una realidad